Han sido bastantes los retos asumidos por la CRC para contribuir a la masificación de Internet en Colombia, porque además de los avances tecnológicos, la rápida evolución de los servicios de comunicaciones representa un reto que obliga a repensar la regulación todos los días para garantizar que los beneficios de acceder a Internet lleguen a toda la población.
Mirando por el espejo retrovisor, fue en el año 2000 cuando la Comisión tomó una de las decisiones que impulsó el uso de Internet conmutado en el país, reduciendo la tarifa para el uso de la línea telefónica en el servicio, lo que significó un aumento del 116% del tráfico de Internet en ese entonces.
Luego en el 2007, definimos por primera vez el servicio que podría ofrecerse a los usuarios como banda ancha, estableciendo las velocidades mínimas, estas fueron 512kbps de descarga o bajada y 256kpbs de carga o subida. Dicha definición fue actualizada en 2019 (25 Mbps de bajada y 5Mbps de subida), medida que ayudó a dinamizar el mercado y mejorar la oferta de servicios para los usuarios quienes pudieron disfrutar del aumento en las velocidades de Internet fijo y que permitió impulsar un mayor número de conexiones en el país.
En 2011, establecimos las condiciones para garantizar la Neutralidad de Internet, gracias a lo cual no es permitido bloquear, ni restringir el uso, envío y recepción de cualquier contenido, aplicación o servicio, esto como parte de uno de nuestros pilares estratégicos más importantes que se enfoca en la protección y el beneficio de los usuarios de servicios de comunicaciones en el país.
Impulsar el despliegue de los servicios a lo largo y ancho del territorio nacional también ha sido nuestra prioridad, para ello, en 2013 publicamos del primer Código de Buenas Prácticas para el despliegue de infraestructura con recomendaciones para las regiones a quienes asesoramos además para la eliminación de las barreras normativas que impiden llevar Internet de Calidad a todos los municipios del país. En esa misma línea, en 2019 definimos la hoja de ruta para promover el despliegue de redes 4G y expandir la conectividad móvil en el país.
Para el beneficio de los usuarios, en 2014 instauramos el modelo de contrato único para servicios móviles, describiendo las condiciones de manera clara y simple, medida aplicada a servicios fijos en 2017 con la simplificación del contrato garantizando mejor entendimiento de los deberes, derechos y las características de los servicios contratados, mientras que en 2018 reafirmamos el derecho de libre elección de los servicios por parte de los usuarios, manteniendo la prohibición de las cláusulas de permanencia para servicios móviles.
Recientemente, en febrero de 2022, expedimos la resolución que incentiva la modernización de las redes en Colombia, que contempla medidas para acelerar la transición tecnológica y es un ejemplo para la región en materia regulatoria. Esta normativa trae beneficios para los usuarios en cuanto a la protección de sus derechos y recoge la visión de política pública para modernizar las redes del país.
Este pequeño balance da cuenta del trabajo realizado por la CRC en los últimos 20 años y que seguirá adelantando en su derrotero de ser un regulador innovador, que impulsa la conectividad en Colombia y la mejora en la prestación del servicio en beneficio de los usuarios, y así facilitar el acceso a servicios de salud, educación, trabajo e información a través de Internet.
¿Cuál es el panorama de Internet en Colombia?